La acción orientadora en el contexto universitario ha de ser continua, centrando la atención en las competencias para la gestión de la carrera. Más aún cuando formamos a educadores de diferentes ámbitos: educadores sociales, pedagogos, maestros de infantil, maestros de primaria y profesorado de educación secundaria en la especialidad de orientación. Los cuales van a ser claves para la formación de generaciones futuras. Trabajar las competencias para la gestión de la carrera favorecerá el éxito profesional (McCarthy,2018). Por ende, como docentes universitarios debemos prestar atención La diferentes técnicas y metodologías que impulsarán las competencias autoconocimientos y desarrollo personal; exploración de la carrera; toma de decisiones y construcción del proyecto profesional (Taverira y Rodriguez-Moreno,2010). ¿Cómo trabajar estas competencias? La respuesta es: desde metodologías innovadoras en las aulas vinculadas con el desarrollo de las propias materias y formación transversal. Así, en esta propuesta mostramos el trabajo desarrollado dentro de un proyecto de investigación, en el cual, llevamos a cabo diferentes técnicas y metodologías, para los cursos superiores, tercero y cuarto de grado, programas transversales para el desarrollo de competencias emocionales y el desarrollo del proyecto profesional; procesos de mentoría con doble finalidad, mejorar las competencias profesionales de los futuros orientadores y trabajar el proyecto profesional de los estudiantes de grado de las titulaciones de educación. Junto a estas acciones transversales, se implementan metodologías innovadoras en las aulas, en los cursos iniciales de primer y segundo grado, como la generación de proyecto, flipped classroom y videos didácticos, los cuales parten de un análisis previo de necesidades de los estudiantes en base a las competencias para la gestión de la carrera. Los resultados obtenidos establecen que las técnicas y metodologías suponen un avance para el estudiante universitario desde su propia percepción. Aspecto que concluye que las acciones orientadores en pro de las competencias para la gestión de la carrera, tanto incorporadas en acciones formativas en las materias como a través de procesos formativos transversales, favorecen el éxito de los futuros educadores.